miércoles, 8 de febrero de 2012

Invierno.

Aún no sé bien si por acierto o por error coincidimos en esas cuatro pareces aquel año y aún menos, por que una pequeña sonrisa acompañada de momentos irrepetibles cruzó aquella clase hasta atravesarme en dos.No me permito dudar jamás de algo como esto,de este sentimiento que late sin cesar, corrijo permitía. Mirando por la ventana que tantas veces te vio venir me di cuneta de que ya era invierno, ese dulce calor había pasado y con él se había llevado nuestro tan adorado Mayo.
No te lo vas a creer pero me encantaría saber que pasó como de una simple sonrisa nació un mundo y como unos simple polos fríos y congelados consiguieron apagar todo el calor que movía ese motor que nos hacía caminar el uno hacía el otro.Gritamelo si quieres o envialo por carta a mi buzón,ya sabes mi calle te la tatue a besos.
Quiero evitar estar aquí sentada mirando como se oscurece el cielo o se tiñe del gris más oscuro.Solo te pido que te gires "Ves, soy yo. Sigo aquí no me he ido".

No hay comentarios:

Publicar un comentario